«¿Qué le da una persona a otra? Da de sí misma, de lo más precioso que tiene, de su propia vida. Ello no significa necesariamente que sacrifica su vida por la otra, sino que da lo que está vivo en él —da de su alegría, de su interés, de su comprensión, de su conocimiento, de su humor, de su tristeza—, de todas las expresiones y manifestaciones de lo que está vivo en él. Al dar así de su vida, enriquece a la otra persona, realza el sentimiento de vida de la otra al exaltar el suyo propio. No da con el fin de recibir; dar es de por sí una dicha exquisita. Pero, al dar, no puede dejar de llevar a la vida algo en la otra persona, y eso que nace a la vida se refleja a su vez sobre ella; cuando da verdaderamente, no puede dejar de recibir lo que se le da a cambio. Dar implica hacer de la otra persona un dador, y ambas comparten la alegría de lo que han creado. Algo nace en el acto de dar, y las dos personas involucradas se sienten agradecidas a la vida que nace para ambas.»
· Erich Fromm.
8.10.17
De El arte de amar
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Qué fragmento tan interesante. De una manera, me recuerda bastante a cierta improvisación hecha por Marlon Brando que no acabo siendo incluida en el corte final del film "Apocalypse Now", que dice lo siguiente:
ResponderBorrar«Toma valentía. Las balas más profundas no han de ser temidas. Napalm, fósforo, o nada que temer, pero mirar hacia dentro para ver a esa retorcida mente que yace por encima de la superficie de todos los humanos, y decir: "Sí, te acepto. Incluso te amo porque eres una parte de mí... Eres una extensión de mí"».
De una forma, evoca muy bien ése dolor y voluntad incondicional que implica el hecho de unirse a alguien de una manera trascendental-emocional, y bueno, el fragmento de Fromm lo deja claro. Sólo pensé en hacer ésta analogía que me pareció bastante relevante. A propósito, muy bueno blog que tienes. Me interesaría contactar contigo para discutir, si es posible.