«La parálisis me gana y me impide cada vez más regresar a mí mismo. No tengo ya punto de apoyo, ni base... me busco no sé dónde. Mi pensamiento no puede llegar hasta donde llega mi emoción, y las imágenes que afloran en mí lo empujan. Me siento castrado hasta en mis más mínimos impulsos. Acabo por ver el día a través de mí, a fuerza de renunciamientos en todos los sentidos de mi inteligencia y mi sensibilidad.»· Antonin Artaud.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario